Teresa Villamil llegó a ‘La Promesa’ para asumir el papel de doncella, pero lo que no anticipábamos era que tuviera un romance con Mauro, quien en ese momento estaba en una relación con Leonor. A pesar de estar enamorados, las diferencias de clase social les impedían estar juntos. Por ello la doncella y el lacayo decidieron poner fin a su relación, pero su amistad sigue siendo especial. Ahora, con la inesperada llegada de Feliciano, parece que está surgiendo una conexión entre él y Teresa. ¿Podrían convertirse en la nueva pareja de ‘La Promesa’?
A medida que avanzan los episodios de la serie, hemos tenido la oportunidad de conocer la personalidad de Teresa, que se caracteriza por su amabilidad, bondad y, sobre todo, su notable paciencia. Por todas estas razones, se ha convertido en uno de los personajes más queridos de la serie. ¿Cómo está experimentando Andrea del Río, la actriz que interpreta a Teresa, esta emocionante aventura?
Durante su participación en Si el servicio hablara, el videopodcast de la serie, Andrea del Río, la actriz que da vida a Teresa, compartió detalles con David Cid y Lidia Sango y reveló importantes adelantos sobre lo que nos espera en la telenovela.
Teresa, entre el amor de Mauro y Feliciano
A lo largo de la serie, el personaje de Teresa ha experimentado una notable evolución. Cuando hizo su entrada en la trama, la vimos como una doncella profundamente enamorada de Mauro, dispuesta a hacer cualquier cosa para que su relación funcionara. Siempre ha luchado por lo que deseaba, pero también ha sabido reconocer que en algunas ocasiones, la mejor opción era decir adiós. Su empatía se ha destacado, especialmente en su relación con Feliciano, a pesar de la discriminación que sufrió por parte de otros miembros del servicio, logrando forjar un vínculo sólido con el hermano de Petra.
Sin embargo, Andrea del Río ha compartido que el confidente más importante de Teresa en ‘La Promesa’ sigue siendo y siempre será Mauro: «Es la persona en la que más confía. Han sanado su pasado y ahora son muy buenos amigos». A pesar de que en algún momento muchos pensaron que Teresa aún estaba enamorada de Mauro, la actriz ha aclarado que no es así: «Mauro fue la única pareja en la vida de Teresa. Ella lo valora mucho y siente un amor especial hacia él, pero es un amor de amigos. Su historia amorosa ya llegó a su fin».
Además, Andrea ha compartido su deseo de ver a Mauro y Cruz como pareja: «Ambos son muy elegantes. Sería divertido verlos juntos». Sin duda, esta posible relación sería interesante de presenciar en la trama.
Si Teresa fuese marquesa
David Cid y Lidia Sango, quienes interpretan a un lacayo y una doncella en el palacio, han preguntado a Andrea del Río cuál sería el primer decreto de Teresa si llegara a ser la marquesa de Luján. La actriz tiene una respuesta clara: «Su primer mandato sería mejorar el trato hacia el servicio». Pero ese no sería su único objetivo: «También daría más importancia a las mujeres, a pesar de estar en 1913. Sería una marquesa más progresista que Cruz». Sin duda, la idea de ver a Teresa como marquesa de Luján suena emocionante.
Además, Andrea del Río ha compartido a quién le hubiera gustado interpretar en la ficción, y su elección es Catalina: «Me encanta Catalina. Me gusta mucho su estilo de vestimenta, incluso me la pondría en mi vida cotidiana con zapatillas deportivas». Una elección magnífica, sin duda, considerando el atractivo y el carisma del personaje de Catalina.
La anécdota más divertida de Teresa del Río en La Promesa
¡Qué divertida anécdota! Andrea del Río compartió un momento memorable durante la escena de la muerte del barón de Linaja en la serie. En esa escena, las actrices, incluyendo a Andrea como Teresa, María Fernández (Sara Molina), Jana (Ana Garcés) y Pía (María Castro), tenían que representar nerviosismo, histeria, angustia y ansiedad, además de llorar y mostrar temblor. La tarea era enrollar el cuerpo del barón en una alfombra.
En medio de esta intensa escena, Andrea del Río se dio cuenta de que la cabeza del actor Alberto González, quien interpretaba al barón, estaba a punto de chocar con una esquina. En lugar de detener la escena, Andrea trató de avisar a sus compañeras gesticulando discretamente, mientras seguía llorando desconsoladamente. Su capacidad para mantenerse en el personaje y resolver la situación de manera profesional es realmente admirable.
Los momentos detrás de escena siempre agregan un toque especial a la experiencia de ver una serie.