En el capítulo de este viernes de La Promesa, después de confesar su embarazo a su madre, Jimena muestra más afecto hacia su esposo siguiendo los consejos de la Duquesa. Martina, tras su desaparición, se muestra reacia a reunirse con su familia, quienes solo le reprochan, y evita encontrarse con Curro o explicar su comportamiento. El cuidado de Ramona acerca más a Abel y Jana, fortaleciendo su relación como un equipo bien coordinado. Sorprendentemente, Carlos regresa al palacio con buenas noticias, ya que finalmente se ha reconciliado con su hija. María Fernández no logra comprender la hostilidad de su antiguo novio al rechazar el dinero que podría ayudar a curar su ojo herido. En cuanto a Pía, comparte con Abel los malestares que está experimentando, pero el médico la tranquiliza explicando que el parto aún no está próximo.
Te contamos lo que veremos mañana en La Promesa, en el capítulo 172 del lunes 27 de agosto.
La Promesa Capítulo 172 del lunes 27 de agosto
Pía ha comenzado a tener contracciones, a pesar de las afirmaciones previas de Abel de que el parto no era inminente, lo que provoca un gran alboroto entre el personal debido a la llegada inesperada del bebé de su compañera. Se verá si finalmente Pía da a luz, algo que Petra no considera seguro, mientras Abel advierte a Jana sobre los posibles riesgos para la vida de Pía y el bebé.
Mientras tanto, después de presenciar a Jimena y Manuel compartiendo momentos íntimos en la cama, con Jimena incluso expresando su amor por su esposo en voz alta, todo con el objetivo de concebir un hijo de verdad, ahora planea ir de excursión con su marido. La noche de pasión parece haber mejorado mucho el estado de ánimo de Jimena, algo que sorprende a todos. Parece que Jimena se ha entregado a la pasión de tal manera que no puede distinguir entre su plan y sus verdaderos sentimientos. Manuel se ve obligado a moderar su comportamiento en lugares públicos del palacio. Ciertamente, es sorprendente cómo ha cambiado.
Feliciano hace todo lo posible por aprender su oficio y observa cómo sus compañeros tienen una fuerte camaradería. Sin embargo, Petra desilusiona a Feliciano al explicar que toda esa camaradería es falsa y le advierte que tenga cuidado. Además, Feliciano sigue coqueteando con Teresa, halagándola al llamarla hermosa, y ella responde positivamente. Parece que hay una tensión romántica creciendo entre ellos.
Por otro lado, Fernando y Margarita continúan desconfiando de las intenciones de su hija, ya que su comportamiento y fuga del palacio los han tomado por sorpresa. A pesar de lo que su hija les ha dicho, siguen cuestionando si pueden confiar en ella. Fernando sugiere la idea de enviarla a un convento durante un año para apaciguar su temperamento y esperar que regrese más sumisa. Mientras tanto, Alonso le cuenta a Cruz que se siente cada vez más incómodo con la situación entre su hermano y su cuñada, y desea no tener nada que ver con el asunto.
Salvador sigue sin entender la situación y decepciona a María Fernández al insinuar que rechaza el dinero para recuperar la vista porque piensa que es un plan de Lope para ganarse su afecto. María se indigna y le aclara que no es un objeto que pueda ser conquistado, sino una mujer libre e independiente.
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