En el capítulo de este lunes de La Promesa, Pía se pone de parto, pero la situación se complica y parece que el proceso tomará más tiempo de lo anticipado. Ante esto, Abel solicita la ayuda de Jana para asistir a la ama de llaves. En su intento por concebir, Jimena busca el consuelo de su esposo a través de abrazos, pero él, obsesionado con Jana, la evita. Los planes de Jimena se ven amenazados, ya que si no queda embarazada, su engaño será descubierto. Alonso comienza a cuestionar el respaldo que están brindando a Martina y comparte sus inquietudes con Cruz, recordando cómo orquestaron los matrimonios de Tomás y Manuel sin consultarles. Sin embargo, todas estas preocupaciones pasan a un segundo plano cuando una carta inesperada de la Casa Real llega a La Promesa.
Te contamos lo que veremos mañana en La Promesa, en el capítulo 173 del martes 29 de agosto.
La Promesa Capítulo 173 del martes 29 de agosto
La recepción de la carta enviada por Don Antonio de Carvajal y Cifuentes genera un gran impacto en La Promesa. La familia entera espera ansiosamente el contenido de la misiva del joven que busca el afecto de Martina. La noticia de su próxima visita al palacio desencadena un verdadero cambio en la situación.
La llegada de Don Antonio pone a Fernando y Margarita en una posición destacada, lo que incomoda aún más a Cruz y Lorenzo. La Marquesa y el padre de Curro ven cómo sus intentos de obstaculizar la boda entre su sobrina y el Duque se desvanecen. Conscientes de que necesitan actuar, se encuentran sin planes concretos. En un acto desesperado, consideran involucrar a Curro como su última opción, y su padre intentará persuadir al joven a participar en sus intenciones.
La llegada de Don Antonio también causa caos entre el personal del servicio, especialmente debido a la preocupante condición de Pía, quien experimenta dificultades en su embarazo y sufre dolores intensos. La vida de Pía está en peligro, y el personal se ve abrumado por el trabajo y el temor por su bienestar.
Mientras tanto, aparte de Fernando y Margarita, solo Manuel celebra la llegada del joven, ya que esto le da una excusa para retrasar su mudanza a Madrid según los deseos de Jimena. Manuel también está inquieto por la relación cada vez más cercana entre Jana y Abel, quienes pasan mucho tiempo juntos. Esto preocupa a Manuel, ya que siente que ha surgido una conexión entre ellos que no le agrada.
Jana le asegura a Manuel que su juicio inicial sobre Abel fue erróneo y que el médico se ha ganado el cariño de la gente, lo que perturba a Manuel. El médico y la doncella trabajan incansablemente para garantizar el parto seguro de Pía, pero la situación se complica gradualmente. Todos están ansiosos, ya que cada vez pasa más tiempo sin noticias. Además, el bebé está en posición de nalgas, lo que requiere una intervención.
El inminente parto de Pía y la llegada de Don Antonio ponen nuevamente bajo presión al personal, quienes son advertidos de que tendrán que trabajar arduamente. Las tareas se multiplican y Feliciano no se adapta del todo. Aunque el hermano de Petra intenta ayudar, su oferta es rechazada debido a la desconfianza hacia él. Solo Teresa muestra interés en él, solicitando a Mauro que lo involucre en el trabajo que están llevando a cabo. Teresa también trata de convencer a Simona, Candela y Lope de que el joven merece una oportunidad y no tiene relación con su hermana.
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