«Él es mi hijo» es una telenovela turca que ha cautivado al público internacional con su emocionante trama y personajes entrañables. En medio de giros inesperados y conflictos familiares, la historia llega a su desenlace con un final impactante y conmovedor que deja a los espectadores pegados a sus pantallas. En este avance, te contamos cómo acaba la telenovela «Él es mi hijo», analizando las principales escenas y desenlaces de los personajes que han cautivado a los espectadores de la novela turca.
En los últimos capítulos de «El es mi hijo»
Efe regresa a casa en buen estado de salud. Ender, que fue encerrado en una cámara frigorífica por su abuelo, es rescatado con éxito por Ali Kemal. Una vez en la mansión, el niño quiere olvidar lo ocurrido y pasar tiempo con sus padres. Ali Kemal, quien trabajó como pizzero en el extranjero, recupera su faceta de cocinero y prepara una pizza casera junto a toda la familia para compensar al niño por el mal rato vivido. Después de la cena, el niño pide una foto con su Burak para recordar este día con cariño en el futuro.
Por otro lado, Emine y Zeynep se meten en problemas cuando deciden guardar el maletín lleno de dinero robado de Sahin. Le dan a Akça mil dólares para que compre un vestido para el juicio, pero cuando intenta cambiar el dinero por liras turcas en el banco, se da cuenta de que los billetes son falsos. Akça es detenida y llevada a la comisaría.
Hasan está preocupado porque piensa que Akça no podrá presentarse en el juicio, y su abogado le sugiere que encuentre a Sahin y lo entregue a la policía. Para lograr esto, Hasan va al bar donde Sahin suele desayunar y lo obliga a confesar, grabando todo con un micrófono oculto. Después de la confesión, la policía llega al lugar y detiene a Sahin.
Akça y Hasan logran llegar justo a tiempo para el juicio. Akça relata su historia y el juez se compadece de ella, otorgándole la custodia total de Efe. El niño se despide de la mansión y se muda a la casa de Hasan, pero no se adapta bien a su nueva vida y extraña mucho a Ali Kemal. Después de pasar varias noches llorando y pidiendo volver a casa, Hasan acepta que Ali Kemal haga una visita a su hijo.
El final de la serie «El es mi hijo»
Hasan lleva a Efe a la antigua bodega de su padre donde le muestra uno de los cuadros que Ali había pintado antes de su fallecimiento. Mientras el pequeño intenta tocar el cuadro, accidentalmente lo tira al suelo. Al recogerlo, descubre una nota amenazante escondida en el marco, la cual sin lugar a dudas pertenece al asesino de Ali.
Impresionado por el hallazgo, Efe busca al amigo de su padre para mostrarle la nota, pero al llegar, lo encuentra en el suelo, cubierto de sangre y con una herida enorme en la frente.
Convencido de que Riza está involucrado en la muerte del anciano, Hasan visita su mansión para descubrir la verdad. Durante su visita, encuentra una nota de Riza deseando un buen día a Sule y, después de compararla con otra nota, concluye que Riza es el único culpable de la muerte de su padre.
Sabiendo que lo buscarán, Riza secuestra a Efe y lo lleva a la tumba de su abuelo Ali. Los hombres de Hasan encuentran el coche y toda la familia se dirige al cementerio para confrontar al mafioso.
Riza admite su crimen y confiesa que su suegro lo obligó a matar a Ali. Luego, entrega una pistola a Hasan y le pide que lo mate como venganza por la muerte de su padre. Hasan se niega y Riza intenta dispararle, pero en ese momento aparece Asiye y le dispara en el brazo.
Riza suplica por su vida, ya que está enfermo y solo le quedan tres meses, pero Asiye cree que es demasiado tiempo y lo remata con un tiro en el pecho. La madre de Ali Kemal es encarcelada, pero antes de irse, deja su casa a nombre de Hasan.
Unos meses más tarde, Akça y Hasan se casan rodeados de sus seres queridos. Al finalizar la celebración, Hasan anuncia emocionado a Efe que vivirán todos juntos en la mansión.
Puedes ver los capítulos completos de El es mi hijo en Mitele.es
